Estrada Zavala, Edgar Alonso; Estrada Zavala, Edgar Alonso::orcid::0000-0002-6157-9445
Abstract:
Las enfermedades producidas por bacterias farmacorresistentes son uno de los principales problemas de salud pública a nivel mundial debido al uso desmedido e irracional de los antibióticos en la última década, haciendo que los tratamientos actuales sean ineficientes. Este tipo de enfermedades producen millones de muertes al año. La OMS estimó para el año 2050 sería la primera causa de muerte a nivel mundial. Entre las bacterias resistentes más comunes en humanos se encuentran Escherichia coli (E. coli) , Klebsiella pneumoniae (K. pneumoniae) y Staphylococcus aureus (S. aureus), siendo esta última aislada con mayor frecuencia observándose que un 20 a 80 % de la población posee una variante de S. aureus resistente a meticilina (SARM), que ocasiona infecciones de piel, tejido blandos, neumonía y endocarditis. Esta situación ha generado un gran interés en la comunidad científica en la búsqueda de compuestos nuevos que presenten actividad antibacteriana sin ser tóxicos, obteniendo así alternativas terapéuticas frente al incremento de microorganismos multirresistentes. Una alternativa es la obtención de aziridinas, las cuales se encuentran como estructura base de un gran número de compuestos bioactivos que han mostrado actividad frente a SARM, por lo que la obtención de nuevos compuestos de tipo aziridina pueden llegar a ser candidatos importantes para combatir las infecciones farmacorresistentes producidas por bacterias. En este proyecto se planteó sintetizar la N,N-dibencilaziridina a partir de L-serina y evaluar la actividad antibacteriana. Los intermediarios y la aziridina fueron obtenidos con rendimientos del 80 al 93% estos fueron caracterizados por métodos FT-IR y RMN 1H, RMN 13C y EM-IE, observándose que la clorocetona 40 presentó actividad antibacteriana por microdilución en caldo contra once bacterias con CMIs de 25 a 200 μg/mL siendo mayormente activo frente a S. aureus inclusive con el fenómeno de resistencia bacteriana (SARM-1, SARM-2, SARM-3, SARM-4, SARM-5) y determinándose una CL50 de 50 μg/mL por el ensayo de Artemia salina. Lo que es interesante debido a que hay pocos estudios donde se evalúen clorocetonas esto nos indica que estas también pueden llegar a ser candidatas para combatir bacterias resistentes.